lunes, 8 de septiembre de 2008

Cerrar las heridas, honrar a las víctimas, aprender de la Historia

No voy a entrar en si la inicitativa del juez Garzón es formalmente correcta, eso lo dejo a los especialistas en Derecho. Tampoco entraré a criticar la Ley de Memoria Histórica, eso se lo dejo a los políticos, aunque mi opinión se parece mucho a la defendida por Amnesty International.

Hoy sólo daré dos datos, para que sirvan de reflexión:

- Durante la dictadura de Pinochet hubo unos 3000 desaparecidos/asesinados en todo Chile. No he escuchado a ningún político español criticar a quienes quieren investigar qué pasó, o acusar a las familias de las víctimas de querer "reabrir las heridas" de la dictadura.

- En el diario Sur publicado hoy, el catedrático responsable de la exhumación de las fosas comunes del Cementerio de San Rafael (Málaga capital) cifra en 4400 las personas enterradas, sólo en este lugar, y no duda en afirmar que "en Málaga se produjo un absoluto genocidio tras la Guerra Civil". Pese a lo que digan los libros de Historia, la guerra no acabó en 1939, en el caso de Málaga entraron las tropas franquistas en febrero de 1937 y hasta el año 1951 se estuvo fusilando en el cementerio de San Rafael.

Sólo en Málaga capital, más muertos que en todo Chile. Y así en miles de pueblos y ciudades españolas. Honrar a las víctimas ¿reabre heridas o hace justicia? ¿sepultamos la Historia o la estudiamos, para aprender de ella y mirar, con dignidad, hacia el futuro?