Que 50 personas procedentes de 11 países se reúnan en Andalucía, convocadas por la UNESCO, para compartir sus experiencias, reflexionar en común y trazar propuestas de futuro con el objetivo de desplegar la Alfabetización informacional (Alfin) en todos los ámbitos sociales y educativos…
…es una muy buena noticia.
Que entre esas personas se encuentren profesionales de todo tipo de bibliotecas y centros de documentación, profesores, gestores culturales, desde responsables directivos hasta técnicos que prestan sus servicios “a pie de obra”…
… es una magnífica oportunidad.
Que hayamos sido capaces de combinar la perspectiva académica con la práctica cotidiana de nuestros servicios; la visión experta y realista de unos, con la visión novedosa, desestabilizadora, de otros; la experiencia de países del sur de Europa, con la de los países del Magreb o de Latinoamérica…
… es una muestra de que estamos todos en el mismo barco.
Que en los debates, las presentaciones, los documentos, las conversaciones durante los descansos, se hayan empleado varios idiomas (inglés, portugués, italiano, español, catalán, francés), y que, sin embargo, todos hayamos sido capaces de entender y hacernos entender…
… demuestra que cuando hay voluntad de comunicarse, la diversidad lingüística no es una barrera, sino una oportunidad.
Aunque ha sido imposible conocer bien a todos los participantes en el Taller, haber podido compartir el trabajo, y algunos muy buenos momentos de café, lunch, visitas y tapas con Cristóbal, Gema, Eduard, Nieves, José Luís, Carme, Dídac, Teresa, Javier, María Isabel, Manuel, María, Ahmed, Felicidad, Nadia, Misako, Luisa, Celi, Rosa, Rocío, Susana, etc. ha sido para mi…
… una experiencia inolvidable.
¡Seguimos en contacto, alfineros!